¡Adios a la piel irritada!
¿Has notado que la piel del rostro se irrita con el roce de la ropa, que el viento instantáneamente provoca resequedad, o que aún usando protección solar, tu piel se enrojece y te arde al estar expuesta al sol? Todo esto indica que estás lidiando con una piel sensible que está propensa a descamaciones, alergias y erupciones. Hoy te voy a contar qué hacer para proteger la piel sensible.
Existen pieles sensibles de nacimiento y otras porque con el paso del tiempo distintos factores influyen para que se torne sensible y delicada. Veamos qué puede afectar la piel sensible:
El uso de jabones cosméticos puede causarte irritación, muchas de las consultas dermatológicas derivan de escoger jabones que no tienen el pH balanceado.
El clima puede afectar tu piel, por ejemplo el frío, el sol, cambios bruscos de temperatura y estar en contacto permanente a ventiladores o aire acondicionado, causa alergia y descamaciones.
Los perfumes generalmente causan irritación en la piel del rostro, con esta característica sensible.
Debes tener cuidado al ponerte accesorios, algunos materiales provocan fuertes molestias como rasquiña, que desencadena en lesiones más profundas para la piel que, si no se tratan a tiempo, pueden dejarte marcas difíciles de atenuar.
Distintos productos para el cuerpo, rostro y cabello pueden generar alergias y molestias a tu piel sensible.
La piel sensible se puede ver afectada por la alimentación que llevas, en oportunidades consumir alimentos picantes también proporciona molestias tanto de sensación como de reacción.
